No era exactamente el eslogan de la concentración, pero podría haber servido...
Bien, algunos os preguntaréis a que viene esto. Pues resulta que el pasado jueves 3 de Abril estuve con Marina (mi novia), en una concentración de besos llamada kiss Madrid by Desigual, enmarcada dentro del tour Desigual Kiss the World.
El motivo de la concentración era juntar a miles de personas dándose un beso de manera simultánea y aunque no tengo muy claro cuantos éramos, la verdad es que las previsiones de reparto de camisetas promocionales decían que sólo la conseguirían los 6000 primeros (nosotros si las conseguimos), y había muuuucha gente sin camiseta :P
Fue un evento curioso, porque son las típicas cosas que alguna vez has visto por la tele y a las que nunca te has planteado acudir. Pero esta vez, como era en la plaza de la Luna que está en la zona donde compramos cómics, y a Marina le hacía bastante ilusión, me dije: ¿por qué no?
Y sinceramente, no me arrepiento. Me lo pasé muy bien y viví un evento de esos que después se recuerdan por su singularidad.
Eso si, me da que estar toda la tarde-noche por ahí pasó factura a mi garganta y fue el primer paso para provocar la batalla con el "virus mortal", jejeje...
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