Thor

Thor, hijo de Odín, dios del trueno que domina el rayo y la tormenta...

Siempre me ha gustado la mitología, y uno de los panteones que más ha llamado mi atención desde siempre, es el nórdico. Nombres como Odín, Midgard, Loki, Ragnarök, Bifrost, Surtur... llevan muchos años en mi cabeza, y las leyendas que de ellos se cuenta siempre me han encantado. Hasta el punto que llegué a escribir una campaña para una partida de rol ambientada en Asgard de la que estoy muy orgulloso :)

Si a eso le unimos mi ya sabido por todos amor desde la cuna por los cómics, es normal que siempre me haya sentido atraído por la versión de Marvel, que, aunque la mayor parte del tiempo lo mantiene alejado de su lado más mitológico, de vez en cuando crean una saga totalmente mitológica a su alrededor que haría despertar a la propia Jörmungand.

Y tras tres años desaparecido del universo Marvel después de la saga del Ragnarök (la cual debo conseguir a toda costa), vuelve a la vida de las manos de un genio de los cómics como es Joe Michael Straczynski.


No hace ni media hora que me he leído el primer número de la serie, y ya tengo una de las mejores frases que he leído nunca en un cómic puesta en los labios de Donald Blake (el que durante muchos años fuera el lado mortal de Thor):

"No corresponde a los dioses decidir si un hombre debe o no existir, sino a los hombres decidir si los dioses existen o no".

Si el primer número comienza de esta forma, ¿necesito algún motivo más para confirmar que fue una buena compra?

No, creo que no...